Desde el boom de internet y especialmente de las redes sociales, mucho se ha hablado de cómo estas nuevas herramientas de comunicación potencian la participación ciudadana. Es evidente que se trata de nuevos medios que hacen posible esta participación, pero que existan los medios no significa que se usen. Es decir, que exista el potencial participativo de los socialmedia (innegable) no tiene porqué traducirse en una mayor participación ciudadana. Por ello es interesante analizar cómo, cuándo y cuáles son las causas que conducen (o no) a una mayor participación.
En este sentido, en el número 49 de la Revista Comunicar encontramos un artículo que refleja los resultados de una investigación sobre la implementación en el aula de iniciativas de alfabetización y sus efectos en la participación. El artículo está titulado precisamente La educación mediática como estrategia de participación cívica on-line en las escuelas portuguesas y está firmado por Tania Dias-Fonseca, Secretaría de Educación y Cultura de la Región de Azores (Portugal), y John Potter, del Instituto de Educación del University College en Londres (Reno Unido).
Tras encuestar a más de 1.500 personas, entre directores de centros, profesorado y alumnado, los investigadores concluyen que «los niveles mediáticos de los estudiantes y sus niveles de compromiso cívico on-line están influenciados por las prácticas de sus profesores, su formación y por la implantación de proyectos de alfabetización mediática». Por lo tanto, parece evidente que para fomentar la participación es necesario formar como ciudadanos a los estudiantes e incluir la alfabetización mediática en la escuela.